La
verdad es que no se como me va a salir este post. El motivo es que tengo tantas
ideas en la cabeza que no voy a saber
expresarla. Y antes de continuar pido perdón por el resultado.
Hace
unos meses empecé un libro, no voy a decir cual es titulo porque no merece la
pena. El libro no lo pude terminar, me fue imposible. La causa no fue la falta
de tiempo, ni tampoco que tenía mucho trabajo, ni siquiera que he estado de
vacaciones. No lo he terminado porque simple y llanamente no me ha gustado. Los
motivos son dos:
El
primero es por las cantidades de palabrotas que aparecen. Entiendo que una
palabra mal sonante en un determinado momento no esta mal, pero que el
vocabulario de uno de los personajes sea constantemente diciendo palabras mal
sonantes me parece de un mal gusto. Y el segundo motivo fue la masculinización
del personaje principal. A ver si me explico bien. La protagonista es una chica
que es policía y tiene que resolver un asesinato. Pero esta tan obsesionada por
ser igual que sus compañeros policías que prácticamente ha perdido toda su
feminidad. Y eso para mí que soy mujer
me parece una aberración. No soy machista, pero creo que el feminismo al
extremo hace un mal favor a las mujeres.
Las
mujeres, gracias a mujeres valientes, hemos conseguidos llegar a todos los
rincones. Conozco a mujeres militares, Guardias civiles, conductoras de
autobús. No las conozco pero sé que hay mujeres mineras, albañiles. En
definitiva en todos los puestos de la sociedad y en todos los empleos gracias a
Dios hay mujeres. Pero eso no es óbice para que la mujer pierda su feminidad y esa batalla la estamos perdiendo. Me da mucha
pena cuando oigo a las adolescentes y no tan adolescentes hablar del sexo. Hablan de un sexo masculino,
no de un sexo femenino. Hablan de placer y no de entrega, hablan de divertirse
y no de respeto. Yo pienso que hay que dar clases de sexología en las escuelas,
no me parece mal, me parece una buena idea. Pero que estén bien planteadas. La
naturaleza del hombre es totalmente diferente a la de la mujer. El hombre tiene
otra manera de ver el sexo, no es ni mejor ni peor, es diferente. No soy hombre y a lo mejor no capto bien la idea e incluso me
puedo equivocar, pero el hombre busca mas el placer, la mujer entrega el alma.
Y cuando se da cuenta que ha sido utilizada para pasar el rato el trauma
psicológico es terrible y el daño esta hecho. Entonces nuestro subconsciente es
defendernos masculinizando nuestra sexualidad.
Las
clases de sexología no deben ser lecciones de cómo hay que hacer el acto sexual
y que tipos de relaciones sexuales hay. Sino que deben enseñar como respetarse,
como valorarse, como amar en definitiva, pero amar con Mayúscula. Con entrega,
sin egoísmo y esperar el momento adecuado, que para mi es una vez que te hayas
casado.
Hoy
en día cuando se dice esto se ríen de ti, piensan que es una antigualla y que
es del siglo pasado. ¿Pero hay algo más
bonito, respetuoso y con mayor amor que aprender juntos una vez que dos
personas se han convertido en una? ¿No es maravilloso que a la persona que te
estas entregando ha prometido delante de Dios, que estará contigo en la salud y
en la enfermedad, en la pobreza y en la riqueza? Otra cosa que después por circunstancias
ese matrimonio se rompa pero de ese tema hablaremos otro día.
Todo
lo que he escrito es porque deje de leer un
libro que para mi era malísimo. Pero en compensación leí otro que sabia
que no me iba a defraudar. Su autora es una de mis escritoras favoritas Reyes Calderón. Ya he recomendado un libro
suyo en mi bloguito y ahora voy a recomendar otro.
Se
titula El Jurado Numero 10. Su personaje se llama Efrén Porcino. Es un abogado
que por ayudar a su secretaria….
No
sigo para que lo leáis, merece la pena. Es impresionante como Efrén defiende la
feminidad que antes hacíamos mención.
Como defiende a la mujer. Y como la realza.
De
verdad leedlo porque merece la pena y a demás ha ganado el premio de abogado de
novela.
Espero que disfrutéis mucho
Hetepheres Benítez Collantes